Los Monty Python decían en “La vida de Brian” aquello de “Always look on the bright side of life” (Mira siempre el lado bueno de la vida), hoy intento hacer ese ejercicio en el mundo de la cerámica
La pasada semana disfrute (literalmente) de unos días en Valencia con motivo del Intercontinental Ceramics. En ocasiones envidio la vida de los ceramistas profesionales, o lo que quiero pensar pensar que su vida: levantarse, ir al taller, trabajar a diario con el barro, preparar cocciones y encargos… Pero ser editor tiene también una faceta que me hace pensar que soy afortunado.
En este viaje he podido compartir buenos momentos con viejos y nuevos amigos ceramistas valencianos, también con las invitadas de Japón, Alemania y Estados Unidos; hablar de cerámica, hornos cocciones, criticar o alabar aspectos de nuestro pequeño mundo de la cerámica.
Y una de las conclusiones a las que he llegado ha sido que, en el fondo y a pesar de que, no sin parte de razón, nos quejemos de la situación de la cerámica, realmente estamos en un momento en el que existen numerosas posibilidades de disfrutar de todo lo que rodea la cerámica, el arte y la artesanía.
En Valencia, en el plazo de unas pocas semanas, se ha desarrollado el citado evento Intercontinental Ceramics, pero además, y solapándose en el tiempo, hemos podido disfrutar de la visita de ceramistas chinos, con exposición incluida en el Museo Nacional de Cerámica “González Martí”, donde simultáneamente pudimos visitar una excelente exposición de la ceramista valenciana Patricia Varea y el Japonés (residente en España) Takashi Matsuo; y dentro de poco se celebra, también en Valencia “El turno del torno”.
Obviamente esto son momentos puntuales, no siempre hay tantas actividades pero, si hablamos con otros artesanos o artista que trabajen en otras disciplinas, seremos conscientes de que el mundo de la cerámica no está tan mal. ¿Existen decenas de ferias dedicadas al vidrio? ¿o a la forja? ¿o a la escultura? De cerámica sí. ¿Existen otras disciplinas que cuenten con un número similar al de concursos de cerámica? Creo que no.
Creo que antes de lamentarnos por “lo poco reconocida que está la cerámica”, quizá deberíamos en ver el lado positivo, y valorar las numerosas formas que existen de disfrutarla.
No seré yo quien lo niegue: es difícil vivir de la cerámica; pero es que en este momento no es mucho más fácil querer vivir de la investigación en ciencias o de otras formas artísticas. Por cada actor glamuroso que vemos en “los goyas”, hay centenares de actores tratanto a duras penas de subsistir; por cada pintor que triunfa en ARCO, ¿Cuántos hay que compaginan su actividad creativa con un trabajo en Mercadona?
Vamos a tratar de mejorar, pero mientras tanto…, disfrutaremos de los que tenemos.
Nota: Always look on the bright side of life. Obligatorio volver a verlo de vez en cuando.
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Mensaje de Wladimir Vivas:
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Wladimir Vivas
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