La Galería Officine Saffi presentó durante el mes de julio, en su sede de Milán, la exposición titulada “We are walking, talking minerals”, primera exposición individual en Italia de la artista griega Chryssa Kotoula (1995, Larissa)
Información enviada por la organización:
La exposición es el resultado de un periodo de investigación y experimentación llevado a cabo durante la residencia de la artista en la fundación. La serie de obras que se presenta surge de la observación y reinterpretación de residuos cerámicos procedentes de los talleres de la fundación —barros secos, esmaltes cristalizados, pigmentos sin usar— que Chryssa Kotoula ha recolectado y transformado en piezas artísticas. Combinando destreza técnica con una profunda sensibilidad hacia el material, su proceso explora nuevos usos y posibilidades para los restos generados por la práctica cotidiana en el taller.
La práctica de Kotoula desdibuja los límites entre arte, diseño funcional y artesanía, y explora el potencial expresivo único de la cerámica. Su trabajo puede leerse como una forma de arqueología inversa: aunque remite visualmente a vestigios del pasado, imagina en realidad un posible futuro para aquello que habitualmente se considera desecho. En el centro de su investigación se encuentra una reinterpretación de la técnica del terrazo —descrita por primera vez por Plinio el Viejo en el siglo I d. C. y tradicionalmente utilizada para crear superficies continuas y resistentes a partir de una mezcla de materiales—. Kotoula reformula esta lógica dentro del lenguaje cerámico, incorporando fragmentos de esmalte y arcilla directamente en la masa de la obra, en lugar de aplicarlos sobre su superficie. Así, cada pieza se configura a partir de una relación específica entre contexto, materiales disponibles e intención artística, generando narrativas abiertas y estratificadas. De este proceso emergen formas híbridas y ambiguas que desafían tanto el espacio doméstico como el expositivo, y se sitúan en una tensión constante entre objeto y organismo, prototipo y artefacto.
Esta tensión no es solo formal, sino también ética y procesual: cada obra está concebida para ser cocida una única vez, y a una temperatura más baja, con especial atención a su resistencia estructural. Esta estrategia responde a una visión de la cerámica como práctica circular: una práctica que no solo busca reducir el impacto ambiental, sino que se basa en el uso consciente de lo que ya existe.
El título de la exposición se inspira en un pasaje del libro Materia vibrante: Una ecología política de las cosas, de Jane Bennett, donde la autora rechaza la visión tradicional de la materia inerte como pasiva. En su lugar, propone que toda materia —incluidos los minerales— posee vitalidad y dinamismo. Desde esta perspectiva, los seres humanos no están separados ni por encima de la naturaleza, sino que son ensamblajes de elementos y fuerzas dentro de un sistema interconectado. Un principio similar guía el proceso artístico de Kotoula: sus obras emergen como presencias autónomas y compuestas, moldeadas por la experiencia vivida de los propios materiales. A menudo sostenidas por estructuras que recuerdan patas, ocupan el suelo y las paredes de la galería con estratificaciones ramificadas y enigmáticas que revelan las historias químicas y cromáticas inscritas en los residuos cerámicos de los que proceden.
Finalista en la quinta edición del Premio Officine Saffi, Chryssa Kotoula fue galardonada con el Premio Especial Officine Saffi en mayo de 2024, un reconocimiento destinado a promover y apoyar prácticas innovadoras en la cerámica contemporánea.
Officine Saffi
Via A.Saffi, 7
20123 Milano, Italia
Tel. +39 02 36 68 56 96
Email: award@officinesaffi.com
Web: www.officinesaffi.com
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