Exposición “Alexandre de Riquer siempre tendrá un plato a la mesa”

La ACC presenta una breve exposición de cerámica de Eulàlia Sayrach, un acto más de los muchos que se han estado realizando para conmemorar el año Alexandre de Riquer. (A pesar de que el centenario de su muerte fue en 2020, muchas actividades se han pospuesto en 2021 y 2022 debido al confinamiento)

Alexandre de Riquer desarrolló su creatividad a finales de los siglos XIX y XX. Modernista arquetípico, se convirtió en un artista total que cultivó en paralelo y de forma cualitativa el arte y la literatura, así como la pintura, el dibujo y el grabado, Riquer se dedicó a las artes aplicadas, diseñó carteles y ex-libris y, también hizo de decorador.

Como escritor, escribió poemas, narraciones, biografías y textos críticos sobre arte y artistas. Hombre curioso y de gran sensibilidad, fue un gran bibliófilo y coleccionista. El amor por los libros llevó al artista a combinar sus talentos en la elaboración de los libros propios ilustrándolos él mismo.

El Poema del Bosque en concreto, es el que sirve de inspiración a Eulàlia Sayrach para la colección de platos que expondrá en la Sala ACC.

Formada desde pequeña en la disciplina cerámica, cultiva este arte hasta la actualidad, que nos trae esta pequeña muestra acompañada de la presentación del libro El simbolismo artúrico en el Poema del Bosque de Alejandro de Riquer, libro de artista elaborado por Carlos Molinos.

También nos acompañará en esta presentación Teresa Costa-Gramunt, comisaria del Any Riquer.

Empezado a componer en el momento álgido de la carrera artística del autor, el Poema del bosque, considerado el mejor representante del prerrafaelitismo literario en nuestra casa, es un pletórico y ambicioso canto épico en la naturaleza como espacio de trascendencia que el hombre de hoy ha olvidado por completo. El bosque, siempre inalcanzable por más que queramos dominarlo, es un lugar mítico, misterioso, fascinante; el bosque está lleno de gargantas, de sirenas, de ondinas, de héroes; el bosque, en definitiva, con toda su pujanza, es como una religión que recorre los cantos de este poema excelso a fin de que la poesía moderna, demasiado alejada de los valores primigenios, vuelva a la naturaleza y la vida.

La creación de la cerámica se da en pleno confinamiento y Eulalia Sayrach inspirándose en el Poema del Bosque opta por grabar en el barro flores, plantas y “malas hierbas” de su propio jardín, en homenajea a Alexandre de Riquer.)