Exposición de Takemura Yuri

Tras su debut internacional en 2017, la galería Mirviss anuncia la segunda gran exposición individual a nivel internacional de la prometedora artista Takemura Yuri (n. 1980). En esta nueva serie de obras, Takemura reflexiona sobre las constantes e impredecibles vicisitudes de la vida. La serie de chawan (cuencos para té) marca una evolución respecto a su producción anterior. Si bien conserva sus característicos remolinos exuberantes y su audaz paleta cromática, la artista incorpora nuevas texturas de arcilla y esmalte que evocan el paso del tiempo a través de una apariencia erosionada y orgánica. Asimismo, ha comenzado a crear esculturas cuyas formas sinuosas y ramificadas narran el transcurso de una vida a medida que se despliega. Para Takemura, trabajar con arcilla es una forma de introspección, una práctica que le permite procesar sus experiencias vitales.

“Cada vez que toco la arcilla, siento una comodidad que une mi mente, mis manos y el material. Las formas que emergen de este intercambio interactúan luego con otras fuerzas externas, transformándose una vez más. Incluso en mis cerámicas hay un ciclo de vida.”

En muchos sentidos, esta nueva serie refleja tanto la alegría como el dolor que Takemura ha experimentado en los últimos años, y cómo esas vivencias han influido en la evolución de su sensibilidad estética. Durante este tiempo, dio a luz a una hija y se dedicó al cuidado de su padre anciano, un diseñador gráfico cuya influencia fue fundamental en su aprecio por el arte y el color. Residente de Kanazawa, Takemura también fue testigo del devastador impacto del terremoto de la península de Noto en 2024, una experiencia que resonó profundamente con su proceso de acompañamiento y duelo. Le impactó especialmente la imagen de los escombros flotando en el mar interior de Kanazawa, muchos de ellos de madera. Al contemplarlos, comprendió que esos fragmentos también habían tenido un pasado, alguna vez vivos y enraizados. Imaginó su transformación futura, moldeados por las olas en nuevas formas dotadas de belleza y energía. Esta reflexión se convirtió en el motor de su nueva producción artística.

“En el núcleo de mi expresión artística está el ciclo de la vida. Todos los seres vivos regresan a la naturaleza y dan lugar a nuevos organismos: suelo, plantas, microorganismos. Las personas siguen viviendo en el corazón de quienes las aman. Incluso al cambiar de forma, la vida continúa. Al reflexionar sobre esto, me conecto con mi propio biorritmo diario y doy forma a las líneas curvas que emergen de él.”

Si bien Takemura continúa explorando la forma del cuenco para té, ha encontrado en la escultura un nuevo cauce expresivo. Esta apertura le ha permitido experimentar con nuevas morfologías y la ha impulsado a replantearse su visión de la funcionalidad en la cerámica.

“Bubbling to the Earth’s Surface”, 2024. Gres esmaltado con “pan de plata”. 10,8 × 12,7 × 10,5 cm.

“Pulse of Earth”, 2024. Gres y esmaltes. 25,4 × 31,5 × 24,4 cm.

“Emerging Glimmer”, 2024. Gres esmaltado con pan de oro. 9,2 × 12,7 × 12,7 cm.

“Trumpet of Dawn”, 2024. Gres y esmaltes. 42,3 × 38,6 × 21 cm.

“Beginning of the World”, 2025. Gres esmaltado con pan de plata. 11,5 × 13 × 14 cm.

“Whirlwind”, 2025. Gres esmaltado con pan de plata. 9,5 × 12,7 × 12,7 cm.