El pasado 7 de septiembre falleció la ceramista catalana Teresa Gironés, este triste hecho aconteció días antes de celebrarse el 47 congreso de la Academia Internacional de la Cerámica, de la que era miembro.
Teresa Gironés falleció a consecuencia de un trágico accidente y complicaciones posteriores, precisamente mientras trabajaba en el montaje de una de las exposiciones incluidas en el programa del congreso. Teresa Gironés fue una de las fundadoras de la Associació de Ceramistas de Catalunya. Y es precisamente entre los miembros de esta asociación donde la consternación se hacía más evidente, junto con la sensación de que su hueco será difícil de llenar.
La cerámica pierde a quien se convirtió en maestra de centenares de alumnos a los que guió desde su trabajo como profesora en la Escuela Llotja, perdemos también a una mujer que trabajó incansablemente por la cerámica, con su actividad en la asociación y montaje de exposiciones o eventos; pero perdemos también a una persona comprometida, que no evitaba las polémicas en su propia obra, que en ocasiones tuvo un claro contenido social y un marcado carácter de denuncia.
Una de sus obras estará expuesta en la exposición La ceràmica a l’arquitectura i l’espai públic, que se puede visitar en el edificio Disseny Hub hasta el 9 de octubre.
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